La prevención de riesgos laborales es fundamental para evitar los accidentes y las enfermedades profesionales. Es una medida destinada a beneficiar al trabajador y a la empresa en igual medida.

Todos los aspectos a tener en cuenta para que la prevención sea efectiva están recogidos en la Ley 31/1995, el  Real Decreto 39/1997 y demás disposiciones legales o reglamentarias que desarrollan y complementan los principios contenidos en los mismos.

Cualquier empresa con al menos un trabajador por cuenta ajena, está obligada a disponer de un sistema de gestión para la prevención de riesgos laborales.

¿Qué opciones tiene el empresario para cumplir con esta Ley y conseguir una gestión efectiva de la prevención?

¿Qué Servicio de Prevención de Riesgos Laborales debo contratar? | ASPREN

Las opciones vienen determinadas por el número de trabajadores de la empresa, su actividad y los medios internos para llevar a cabo la gestión de las actividades preventivas necesarias. (Ver infografía)

Excepto en las empresas de más de 500 trabajadores que están obligadas a tener recursos propios, el empresario debe optar entre la gestión interna con sus recursos o la contratación de un servicio de prevención ajeno, los llamados SPA.

La gestión interna requiere de:

– Formación específica de los trabajadores designados y/o del empresario.

– Dedicación y actualización de los conocimientos respecto a las nuevas normativas.

– Formación a sus trabajadores para que conozcan los riesgos de su puesto de trabajo.

– Contratación de la Vigilancia de la Salud de los trabajadores con un Servicio de Prevención Ajeno siempre, ya que es una actividad que por su especialización no la puede asumir la empresa.

La contratación de un SPA, en muchos casos, facilita la gestión de la prevención a la empresa ya que ofrece:

– Profesionales especializados.

– Asesoramiento específico según la actividad de la empresa.

– Productos que integran todo lo necesario para cumplir con lo que la Ley exige, además de productos complementarios para fomentar la salud y los hábitos saludables a los trabajadores.

Así pues, el empresario debe valorar los pros y contras para decidir cuál es su mejor opción para la prevención en su empresa, sin perder nunca de vista que sea cual sea su elección, siempre tiene responsabilidad respecto a la seguridad y salud de sus trabajadores.